Por increíble que parezca, esta es la primera vez que escribimos sobre un restaurante en el queso es el gran protagonista, pero nos hemos estado reservando hasta que todo un templo del queso madrileño se nos cruzó por el camino, y ese sitio es La Carbonera (C/ Bernardo López García, 11).
Situado en la zona de Conde Duque, La Carbonera es para nosotros un bar de quesos al que le hemos cogido especial cariño con tan sólo dos visitas. La amabilidad y cercanía con la que atienden, su comida con personalidad propia, los impresionantes quesos y vinos con los que acompañarlo y el encanto del local, que invita a quedarse en su barra tomándose un vino y pasar horas y horas de charla evadiéndonos de la rutina del día a día, o esconderse en el fondo del local, donde las mesas bajas y la luz íntima os proporcionarán el escenario perfecto para una cena romántica.
Un recorrido por La Carbonera
La carta rebosa personalidad por los cuatro costados, con platos en los que combinan diferentes técnicas, emplatados que divierten a la vista y una propuesta que fusiona sabores españoles y latinos. Pero, ¿y el queso dónde está? Es cierto que lo encontramos presente en algunos de sus platos, pero la gran estrella de la casa se la reservan para presentarla por separado. Así, la carta se divide cuatro partes: tablas de quesos, platos fríos como la crema fría de tomate con verduras asadas o el ceviche de corvina y langostino, platos calientes entre los que encontramos las setas asadas o el burrito de merluza asada y gambas, y, por último, los postres.
Luego tenemos los vinos, un mundo al que últimamente estamos mirando con curiosidad desde que se cruzaron por nuestros paladares los vinos naturales y orgánicos que tan de moda están en Madrid. En La Carbonera cuentan con una amplia selección, así que id sin miedo y, si no tenéis ni idea como nosotros, preguntad, porque son todo un mundo que merece la pena conocer y probar.
Tabla de cinco quesos
Las tablas de queso son la gran seña de identidad de La Carbonera. Seleccionados con mucho cariño y tratando directamente con los propios productores, son ideales tanto para acompañar una copa de vino como para ser el entrante de cualquier comida. Podréis elegir entre tablas que van desde cuatro hasta diez quesos, o directamente probar todos los que tengan disponibles, en un formato de media tabla o tabla completa. ¿Y qué quesos llevan? Eso ya dependerá de vuestros gustos, pues podréis elegir entre quesos suaves, medios y más fuertes. Por ejemplo, nosotros pedimos media tabla de cinco quesos que iban desde sabores medios a intensos (un queso madrileño de leche cruda de oveja madurado en trufa, pecorino madurado en heno, queso ahumado cántabro de leche cruda de vaca, otro de León madurado en cerveza IPA y un queso gallego súper cremoso que recuerda al queso azul). En definitiva, el paraíso para los amantes del queso en Madrid.
Salmón marinado
Pasamos a los platos fríos con el tartar de salmón marinado en lima, jengibre y pimienta. Aunque para la foto se nos desmontó un poco (culpa nuestra, que somos un poco lentos haciéndolas), lo sirven acompañado de emulsión de aguacate, helado de mostaza y coronado por una galleta de Parmigiano que le da el punto crujiente a un bocado que siempre asociamos a la suavidad. La combinación de todos los ingredientes os trasladará a los países escandinavos, o eso nos pasó a nosotros, que somos unos frikis del Norte.
Ravioli en masa wonton
El nombre ya resulta lo suficientemente atractivo como para negarse a pedirlo en cualquier visita a La Carbonera. Estos «ravioli» vienen rellenos de calabacín, cebolla y hierbas aromáticas, todo ello bañado en un espectacular katsu curry japonés con salsa de setas. Una fusión de ingredientes con sabores especiados y un punto picante que hará las delicias de los amantes de los sabores asiáticos y de aquellos a los que les encanta mojar el pan en la salsa.
Tarta de queso
De un bar de quesos uno no puede concluir cualquier comida sin probar la tarta de queso. En La Carbonera huyen de la canónica tarta de queso y nos brindan una propuesta deconstruida y servida en una amplia copa donde los ingredientes se reparten en tres capas: una base de crumble, un cremoso relleno de queso de cabra y mermelada de naranja. Una cosa importante, la tarta de queso suele cambiar cada cierto tiempo, y os garantizamos que las que hacen son de las mejores de Madrid.
Y sus eventos…
Ojo, porque también hay que estar atentos a la web y a las redes sociales de La Carbonera, pues de vez en cuando os podréis encontrar con eventos y meses temáticos, como el mes del Parmigiano Reggiano del pasado junio, en el que organizaron catas, cocinaron risotto dentro de una enorme pieza de Parmigiano y prepararon una cena maridaje, a la que pudimos acudir, en la que quesos y los riquísimos vinos naturales de Cható Gañán fueron los grandes protagonistas.