Últimamente estamos que no paramos con nuestras vidas, y en mitad de todo el estrés nos apetecía relajarnos un poco y desenchufar con un buen brunch, uno que nos hiciera sentir como en casa, sano y que, por supuesto, estuviera delicioso. Así que nos pusimos a buscar en nuestra inmensa lista de «lugares pendientes» y pusimos rumbo al nuevo espacio de Olivia te cuida (C/ Fortuny, 7, dentro del hotel One Shot). Y sí, dimos en el clavo.
Podríamos decir que Olivia te cuida ya es bastante familiar para nosotros. Siempre que podemos vamos al local de Santa Teresa, 8, a sentarnos en una de sus mesas junto a la ventana para desayunar, y teniendo el precedente de este primer espacio sabíamos que el nuevo estaría como mínimo al mismo nivel. Nada más llegar nos llamó la atención la preciosa decoración y la diferencia entre sus diferentes plantas, pues en Fortuny el comedor se divide en dos pisos: en el primero cuentan con grandes ventanales que llenan de luz la gran mesa central de madera que tienen y las mesas para dos que se reparten por la planta. En contraposición tenemos el piso inferior, un poco menos luminoso pero mucho más íntimo, donde además tendréis vistas privilegiadas a su cocina.
Lo único malo que podríamos mencionar es el desorden con la salida de los platos, pues fueron llegando a la mesa con mucha diferencia entre ellos y mezclándose entre sí siguiendo un orden bastante aleatorio. Imaginamos que esto se debe a que están en las primeras semanas y que el equipo, que a pesar de este contratiempo nos atendió de maravilla, está empezando a rodar, así que esperamos que ya lo tengan mejor organizado, porque es verdad que en la parte gastronómica lo metemos en nuestro Top 3 de mejores brunch de Madrid.
Un recorrido por el brunch de Olivia te cuida Fortuny
Como os adelantábamos, el brunch de Olivia es una propuesta bastante clásica, sin platos extravagantes ni grandes pretensiones porque su apuesta es la de una cocina casera, cercana y de temporada, trabajando con pequeños productores para que cada bocado tenga el sabor auténtico de sus ingredientes (huevos de Cobardes y Gallinas, salmón ahumado de Rooftop Smokehouse, pan de Obrador San Francisco…). Dicho esto, pasamos a la carta del brunch, que se divide en cuatro pasos y se acompaña con té o café y zumo que van incluidos en el precio. También podéis darle un poco de alegría con el cóctel del día, que os sumará 5€ en la cuenta final. A la hora de elegir hay bastante variedad, lo que convierte ese momento en un drama porque os apetecerá probar todo. Desde las tostadas hasta los huevos, pasando por los boles de frutas y granola, todo está delicioso y conviene preguntar por los diferentes tipos de bizcochos que tienen y el plato del día. Ah, lo más importante: todo esto por 22€. Nada mal, ¿verdad?
Comenzando
Una rebanada de hogaza de pan de semillas con tomate y otra con aguacate, lima, cilantro y pimienta rosa. Imposible ser más feliz con algo tan sencillo. El pan en sí es una maravilla, y la opción con aguacate tiene un sabor muy refrescante gracias al toque que le aportan la lima y el cilantro.
Dulce
Continuamos con un croissant dulce, pero con un ligero punto salado que poco tiene que envidiar a los croissants de nuestras rutas, y un trozo de bizcocho de naranja con un sabor y textura muy suaves. Nos quedamos con ganas de probar el resto de bizcochos porque van variando según el día (en nuestra visita había también para elegir uno de manzana y otro de zanahoria).
Seguimos con…
Los boles. Aquí nos decantamos por la opción de chía con plátano, arándanos, moras, leche de avena, nibs de cacao y nueces, y el de yogurt ecológico con granola y fruta de temporada.
Y para finalizar…
…los huevos fritos con beicon ahumado, verduras y rosti de boniato con eneldo, un plato sencillo pero completo y muy rico. Además, nos pedimos el plato especial del día, que cambia cada fin de semana. Tuvimos la suerte de poder probar el sandwich de pollo escabechado al estilo thai con cilantro, zanahoria y cebolla.
