Los caminos de la repostería son inescrutables. ¿Os acordáis del boom de los cupcakes, la tarta red velvet o los cronuts? ¿Y si volvemos a lo sencillo, lo tradicional y nos dejamos de tonterías? ¿Y si volvemos a los bizcochos? El bizcocho parece que es el hermano pobre de la repostería, el segundón. Pero no es así, porque detrás de una apariencia austera también puede haber sabor, creatividad, lujo, ingredientes de temporada y mucha pasión. Y una vez que se prueba un bizcocho con masa madre de Reposted ya no se los vuelve a mirar igual.
Quizá Reposted os suene de ver sus cajas en alguna cafetería o panadería de Madrid, o porque hemos compartido varias fotos en Instagram, o quizá simplemente porque sus bizcochos son de los mejor que se puede probar de repostería con masa madre. Saben a hogar, a artesano, a mediterráneo. Y para conocer mejor por qué son lo que son quisimos acercarnos a su obrador en el barrio de Imperial para charlar con Raquel Rodríguez, la creadora de estas tentaciones bizcocheras.
La historia de Raquel es de esas que van dando saltos, desde su Alicante natal a Berlín, donde empezó en casa a hacer bizcochos, y de allí a Madrid trabajando en una empresa que preparaba repostería para diferentes cafeterías de Madrid. Pero lo de estar todo el día haciendo solamente carrot cakes y brownies no le apetecía mucho, y al hablar con Raquel es fácil darse cuenta de que a ella le va más la marcha, probar cosas diferentes y salirse de lo habitual. Así es como empezó a fraguarse Reposted, hasta que lanzó la marca oficialmente en una pequeña feria de productores organizada en La Casa Encendida, y al poco tiempo sus bizcochos llegaron a DOT. ¿Y qué mejor escaparate para que te conozcan que la mejor cafetería de Arganzuela?
DOT se convirtió en su lanzadera y a partir de ahí el boca a boca comenzó a hacer su trabajo, hasta el punto de convertir sus bizcochos en los más codiciados de Madrid y poderse encontrar en locales como Obrador San Francisco, Romero Verde, Pastora, Monkee Koffee, 24 Onzas, El Perro de Pavlov… Y ahora también en el proyecto que acaba de lanzar junto a otros productores locales de Madrid: el puesto Ultra Urbanos en el Mercado de Vallehermoso.
Pero a ver, ¿qué hace que los bizcochos de Reposted sean tan especiales para que os demos esta chapa? Os lo diremos de una forma muy sencilla: bizcochos con masa madre. Utilizarla hace que, por una parte, el bizcocho se aproveche de la fermentación natural, pero también da lugar a una masa más húmeda, esponjosa y suave, además de aportarle un aroma más característico. Vamos, que, igual que pasa con el pan, usar masa madre para hacer bizcochos es jugar en otra categoría.
Pero la masa madre no es lo único que hace que estos bizcochos pasen al Olimpo, porque una cosa es quedarse ahí y otra es pasar también a experimentar con los ingredientes y sabores mediterráneos. Raquel nos contaba que en España tenemos una cultura y una tradición de sabores espectaculares, con muchas influencias árabes, y son precisamente estos sabores y el cruce de culturas los que le sirven de inspiración a la hora de elaborar los bizcochos. Así surgen combinaciones como limón y laurel, tahine con miel y ralladura de naranja, lavanda y arándanos (de nuestros favoritos) o manzanilla, mandarina y orejones. Ingredientes naturales, rústicos, sencillos y que reivindican el origen humilde del bizcocho, pero que al mismo tiempo pretenden elevarlo. Van variando con la temporada, por una parte para así poder utilizar ingredientes de proximidad, y también para alejarse de la idea del bizcocho como un postre algo tosco e invernal, demostrando que también se pueden conseguir sabores más frescos.
Si ahora os ha picado el gusanillo, que sepáis que también organiza cursos para aprender a preparar un buen bizcocho panadero, en los que enseña desde la elaboración de la masa madre para bizcochos hasta, por supuesto, hacer un bizcocho como los de Reposted.
¿A que ahora veréis los bizcochos con otros ojos? Para enteraros de todas sus novedades y cursos no dudéis en seguir a Reposted en Instagram, desde donde también podréis encargarle bizcochos para disfrutarlos en casa. Eso sí, cuidado porque una vez los comáis ya no podréis parar hasta haber probado todos los sabores.