Os lo prometimos cuando hicimos la ruta del chai latte por Madrid, y hoy cumplimos nuestra palabra. Teníamos pendiente hablaros de Chimo Chai, una empresa madrileña con alma australiana que elabora sus propias mezclas de chai latte instantáneo y que, como podréis imaginar porque si no no os hablaríamos de ellos, están riquísimos.
Ahora bien, ¿qué tiene de especial Chimo Chai para que nos haya conquistado? Por una parte los ingredientes de sus mezclas, sin químicos ni cosas raras. Todas sus elaboraciones parten de una mezcla de especias masala, leche en polvo y panela para aportarle el punto de dulzor que caracteriza a sus chais. A esto le sumamos que sus mezclas son instantáneas, convirtiendo la experiencia de prepararse un chai latte en casa en una tarea tan sencilla como echar dos cucharas grandes de Chimo Chai en una taza con leche, remover, calentar (a no ser que queráis un iced chai latte) y filtrarlo con un colador para eliminar los posos.
Otra cosa a destacar es que en Chimo Chai han pensado en todo el mundo a la hora de hacer sus mezclas, porque cuentan con cinco opciones diferentes (aunque nos han chivado que tiene novedades en camino) en función de los gustos de cada uno:
- Original: se trata de la base de todas sus mezclas, con canela, jengibre, nuez moscada, pimienta, cardamomo, clavo de olor, panela y leche entera en polvo. Todo finamente molido para que se disuelva bien y con un sabor especiado y dulce. ¿No echáis en falta un ingrediente? Correcto, estas mezclas no incluyen té negro, por lo que queda libre de cafeína.
- Vegano: la opción vegana modifica su mezcla original en un único ingrediente, pues en lugar de la leche entera incluye leche de coco en polvo.
- Cúrcuma: la mezcla parte de la base de ingredientes del original, pero con el añadido de la cúrcuma, aportándole un color amarillento y que viene perfecto para prepararos un golden milk de sabor suave.
- Cúrcuma vegano: lo mismo que su hermana vegana, pero con cúrcuma.
- Picante: Habéis leído bien, chai picante. Esto lo logran introduciendo en la mezcla chile molido. ¿Y de sabor? Pues como era de esperar, es una mezcla que al prepararla en un chai latte mantiene el sabor del chai, pero con un punto picante bastante gracioso que se nota mucho hacia el final del paladar.
Os podréis imaginar que con tanta variedad las elaboraciones y recetas que se pueden hacer son bastante amplias: el tradicional chai latte o un iced chai latte (con leche de avena queda especialmente bueno), un golden milk de sabor suave, helado de chai, tortitas (en lugar de leche usáis una mezcla de chai latte muy cargada) o la última moda: un dirty chai, que consiste en una mezcla de chai latte con un shot de espresso y que, por lo visto, con la variedad picante de Chimo queda de locura.
Ahora que ya lo conocéis, si os apetece probarlo en Madrid lo podréis encontrar en cafeterías como Coffee and Kicks, Santa Kafeína, Urbano Specialty Coffee y en el recientemente abierto Dot Café, en Legazpi. Además podéis comprarlo a través de la web de Chimo Chai en formato de 250g y 500g.